Como usar la bechamel comprada
La bechamel se encuentra dentro de las salsas mucho más reconocidas y exquisitas que se usan en la cocina, cuya receta se fué transmitiendo de generación en generación, en tanto que es la base de varios de nuestros platos mucho más propios. Croquetas, gratinados o platos a partir de pasta se enriquecen y destacan con esta salsa de origen francés.
En nuestro afán por sugerir modelos lácteos de calidad y realizar la vida mucho más simple a nuestros usuarios, en Reny Picot decidimos llevar a cabo nuestra bechamel casera, lista para ser útil a tu conveniencia.
Salsa bechamel.
El día de hoy les explicaré de qué forma elaborar una bechamel exprés sin grumos, de manera fácil y en solo 5 minutos, usando el microondas.
La bechamel o salsa bechamel de origen francés y también italiano pertence a las primordiales preparaciones en la cocina, usada frecuentemente para guisos de verduras, carnes, pastas, etcétera., tal como base de muchas otras salsas como la Mornay Termidor o Villerois.
como realizar croquetas de jamón con bechamel adquiridas para tu familia
El jamón de belotta es el líder de los jamones ibéricos. Este casco obscuro, de caña fina y gusto inusual, fué curado a lo largo de múltiples temporadas en secaderos naturales y viejas bodegas de la comarca de Guijuelo.
El jamón de bellota es una preparación ecológica. Procede de cerdos ibéricos que comían bellotas en las montañas de Castilla y León y Extremadura.
Mejorando la base de las croquetas cocidas
- Las sobras que hemos usado en un caso así son: pollo o gallina, chorizo sin piel, morcilla sin piel, ternera (morcilla) y alguna jamón. La combinación va a depender de lo que te haya sobrado del almuerzo del domingo.
- Se pican finamente los restos del guiso, teniendo particular precaución con las chuletas, los huesos de pollo, la piel de chorizo y la morcilla. Sugiero unas tijeras o un cuchillo que esté bien afilado. Este desarrollo se llama trituración o frotamiento, y es primordial para no conseguir molestos tropezones al comer.
- En una sartén ponemos 2 medidas de cuchara de aceite y en el momento en que esté ardiente agregamos 1 cebolla picada fina. Pasamos unos diez minutos a fuego moderado hasta dorar y agregamos los restos del guiso ahora troceados. Combina todo bien con una cuchara y prueba de sal, si es requisito, ajusta con sal y pimienta. Tras unos 2-3 minutos todo va a estar listo.
- Agregamos la carne a la bechamel y removemos unos minutos mientras que está fría. Verter la masa para croquetas en un molde untado con mantequilla y espolvoreado con harina. Cubrimos con papel de aluminio a fin de que la parte de arriba no se seque y, una vez que se enfríe, ponga el plato en el refrigerador.
- En frío la masa se estira mucho más y se maneja mejor, la dejamos en el frigorífico un día a fin de que se formen bien las croquetas.
- Para el empanado, en el momento en que esté fría, ofrecer forma a la masa con 2 cuchases oa mano. Ofrecemos forma a las croquetas con las manos, dándoles la manera que mucho más nos agrade. Los mucho más habituales ovalados y alargados o redondos, como hice yo en un caso así. Las pasamos por huevo batido y después por pan rallado, que quede lo mucho más crocante viable.
- Si puedes llevarlo a cabo en el hogar, mejor que mejor, pues de este modo escoges el género de pan que mucho más disfrutas. Ciertas mejores croquetas que he probado en mi vida estaban rebozadas con pan de Cea, sencillamente increíble.
- Las ponemos en un plato sin que se peguen y las dejamos en el frigorífico una hora. Pasado el tiempo, sacarlas de el frigorífico y dejar secar un tanto las croquetas antes de freírlas para secar un tanto la masa. Llegados a este punto tenemos la posibilidad de llevar a cabo 2 cosas, freírlos para gozarlos ahora o congelarlos para llevarlo a cabo en el momento en que deseamos.
- Aceptan que se congelan con perfección. Solo deberemos sacarlos de el frigorífico y colocarlos de forma directa a freír, sin descongelar, con aceite muy ardiente, en el momento en que deseamos cocinarlos. Si andas un tanto recluído en el hogar, que es mi caso, te invito a el tema de congelación.
- Calentar una cantidad espléndida de aceite de oliva virgen plus despacio en una olla honda o freidora para freírlos. Freímos las croquetas a fuego fuerte. Regulando la temperatura para no quemarnos. Sacar a un plato forrado con papel absorbente para remover el exceso de grasa. Servimos de manera directa, recién preparados. Esta receta rinde unas 25 croquetas. Es un exitación comerlo ardiente, recién listo, si bien calentito no está nada mal.
Vas a ver que con nuestra receta te van a quedar súper crocantes por fuera y jugosos y llenos de gusto por la parte interior, genuinos… ¡escándalo!